
Jon Rahm volvió a ganar. Esta vez fue en The Genesis, en Riviera, Los Ángeles. Tres títulos en 2023 y cinco en los últimos cuatro meses no admiten discusión. El deportista español del momento se mueve en números que sólo ofreció Tiger.
Un día es Rory McIlroy. Otro, Scottie Scheffler. O Colin Morikawa. Justin Thomas. Max Homa. Xander Schauffele, pero siempre es Jon Rahm. Bailan los rivales con los que se bate el golfista vasco en la parte alta de la clasificación cada semana, torneo tras torneo. Pero él siempre está. El golfista más regular del mundo. Y también, otra vez, el número uno.
Rahm conquistó este domingo The Genesis Invitational, en Los Ángeles, con 17 golpes bajo par, dos de ventaja sobre Homa y tres sobre Patrick Cantlay. Y el triunfo tiene muchos apellidos: a los 28 años, es la décima victoria de su carrera en el circuito americano (una más que Seve y a una de Sergio García), la 19ª en total en su expediente profesional, su quinta celebración en los últimos nueve torneos que ha disputado, su tercer logro en un mes y medio entre enero y febrero, y el regreso al número uno del mundo superando en el listado a Scheffler y McIlroy.
El estadounidense fue 12º con -8 en el campo de Riviera Country Club, en California; el norirlandés, 29º con -4. Nadie resiste el ritmo de Jon Rahm.

Rahm, arrancó con un birdie en el hoyo 1, el empuje de Max Homa, el otro jugador que ha sido sensación en este campo no se rindió hasta el final. Cinco birdies y un bogey lo impulsaron al liderato con un golpe de ventaja cuando Jon falló un putt de metro y medio en el 12
En apenas treinta minutos había perdido los tres golpes de ventaja con los que había arrancado el domingo y que había recuperado tras el hoyo 8 con dos aciertos consecutivos. Luego de hacer tres bogey consecutivos, era el momento decisivo en Riviera, un campo exigente, donde cada golpe es un examen.
Homa, ganador del Fortinet, el torneo que abrió la temporada, y el Farmers, cedió en el 13. Chocó contra un árbol en la salida y cometió un bogey, que los empataba. Patrick Cantlay, a un golpe, y Mitchell, a dos en ese momento, aguardaban un error.

En el 14, un par 3 tramposo, a Jon le toco patear desde más de 15 metros. El putt fue rapidísimo y entro al hoyo sin discusiones. Jon volvía a liderar. Ese punto serenó al vasco, que ofreció los mejores momentos de la jornada. Un punto alto fue el par 3 del hoyo 16, en el que aterrizó un hierro 8 a medio metro del objetivo. El birdie, el quinto del día, sofocó cualquier tipo de rebelión, confirmando que California es su estado fetiche: 5 de las 10 victorias en el PGA Tour han sido ahí.
Tiger y su futuro
La gloria en un día donde los gritos, para la hora de comer, habían sido para Tiger Woods. Acabó con 73 golpes el domingo su primer torneo regular desde octubre de 2020. Tener que pasar por baños de hielo cada vez que disputa un torneo, con la espalda y las piernas destrozadas, es un tormento. “El cuerpo no me permite jugar más allá de los grandes y un par de torneos más. El año pasado jugué tres de cuatro y este voy a intentar completar los cuatro. Y así será el resto de mi carrera“.


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